La ética está próxima a las conductas humanas; por eso
indagaremos qué relación guardan las órdenes, las costumbres y los caprichos
con nuestra conducta, ya que son los motivos fundamentales de nuestra
actuación.
Las costumbres, en cambio provienen más bien de la comodidad
de en algunas ocasiones seguir la rutina
y de tu interés en no contrariar a los otros, esto es, de la presión de los
demás.
La mayoría de las cosas las hacemos porque nos las mandan,
por que se acostumbra hacerlas así, porque son un medio para conseguir lo que
queremos o sencillamente porque nos da el capricho de hacerlas, sin más ni más.
Aquí es cuando aplica la cuestión de la libertad que es
asunto del que se ocupa propiamente la Ética. Libertad es poder decir “si “o
“no”;”lo hago o no lo hago, digan lo que digan mis papa o los demás”;” esto me
conviene y lo quiero”.
Moral
La palabra “moral”, etimológicamente tiene que ver con las
costumbres, pues eso precisamente es lo que significa la voz latina mores, y también
con las órdenes. Sin embargo, hay costumbres y mandatos que pueden ser malos,
es decir, inmorales, por muy órdenes y costumbres que sean.
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